Sígueme en Twitter

miércoles, 16 de agosto de 2017

Crean un chicle como prueba rápida contra la inflamación por implantes dentales.

Ocasionalmente, los implantes dentales implican complicaciones. 


De 6 a 15 por ciento de los pacientes desarrollan una respuesta inflamatoria con los años después de recibir un implante dental. 

Esto es causado por las bacterias que destruyen el tejido blando y el hueso alrededor del implante, en el peor de los casos.

En el futuro, los pacientes se beneficiarán de un método rápido y asequible para evaluar si llevan tales bacterias usando una prueba de diagnóstico basada en una goma de mascar desarrollada por un equipo de investigación farmacéutica en la Julius-Maximilians-Universität (JMU) Würzburg en Baviera, Alemania.

En la práctica, la prueba funciona de la siguiente manera: si hay una inflamación en la cavidad bucal, se libera un agente con amargor mientras se mastica el chicle. 

Los pacientes pueden entonces visitar a su dentista para confirmar la diagnosis y para tratar la enfermedad. 

Este tipo de detección precoz tiene como objetivo prevenir complicaciones graves como la pérdida ósea.

"Cualquiera puede usar esta nueva herramienta de diagnóstico en cualquier lugar y en cualquier momento sin ningún equipo técnico", dice el profesor Lorenz Meinel. 

Él es el jefe de JMU Chair for Drug Formulation and Delivery y desarrolló la nueva herramienta de diagnóstico con la Dra. Jennifer Ritzer y su equipo; la invención se presenta actualmente en un artículo en la revista Nature Communications.


En presencia de afecciones inflamatorias, se activan en la boca enzimas específicas degradantes de proteínas. 

En apenas cinco minutos, estas enzimas también descomponen un ingrediente especial del chicle, de tal modo que procede a liberar un agente amargo que no podría ser probado antes.

El equipo de Meinel proporcionó la prueba de que este principio realmente funciona. 

Los primeros estudios usando la saliva de pacientes fueron conducidos en la clínica dental de Merli en Rimini.

Para lanzar el chicle en el mercado, el equipo de Meinel planea establecer una empresa. 

El profesor asume que tomará de dos a tres años hasta que el chicle esté disponible comercialmente. 

Las pruebas rápidas con el chicle para otras aplicaciones médicas están actualmente en desarrollo. 

"Esperamos poder diagnosticar otras enfermedades con nuestros chicles" para cualquier persona, dondequiera, en cualquier momento. "Diagnosticar para identificar y tratar estas enfermedades tan pronto como sea posible", explica Meinel.